Se ve que la gente aquí tiene algo distinto.

Yo creo que a mi el que me ha convencido ha sido el Señor, porque si soy sincero yo en mi vida he hecho deporte. No soy como Miguel, que sí es deportista de siempre. Yo no,  yo eso no lo llevo en las venas. 

Entonces la idea de ir a hacer surf , al principio no era algo que me atrajera así directamente, pero yo creo que después de haber ido conociendo gente que lo ha hecho, porque esto se iba haciendo ya bastantes años y por su testimonio, yo dije bueno pues ¿porque no vamos a probar? 

Y entonces la primera vez que fui, fue en junio. Fuimos a Aveiero en Portugal y fue una pasada. Disfrute, pero una barbaridad de todo. De el ambiente, de la oración, del estar juntos y del deporte también.  El surf me alucinó y ya le dije a miguel para la próxima soy el primero en la lista. 

En la cercanía con el señor y el estar y tratar muchas veces con el Señor. Porque al final lo que lo que empuja a nuestra vida y lo que alienta nuestra vida es nuestra amistad con Dios . Se ve que la gente aqui tiene algo distinto, o sea que lo que nos une no es solamente un deporte o escapar los unos días de Madrid sino que hay algo más.

Yo creo no somos colegas y ni siquiera amigos, porque muchos todavía no nos conocemos pero ya somos hermanos entre nosotros y eso quieras que nos da un tinte distinto a lo que es esta convivencia. 

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Cargarte de experiencias para seguir creciendo.

A mi me gusta mucho a la hora de la oración acudir a experiencias vitales, que te puedan hacer entender un poco mejor lo que está sucediendo en el evangelio o incluso, lo que está subiendo en tu propia vida. El surf, sin duda, te carga de esas experiencias